REPÚBLICA DOMINICANA, Santo Domingo de Guzmán, Distrito Nacional, 2 de febrero del 2017. Llegó el gran día. Hoy, nuestro gran ganador de la competencia Most Imaginative Bartender, Carlos Mejía, nos representa en el Distrito Federal de México, enfrentándose a otros finalistas de Argentina, Colombia, Brasil, Chile, Panamá, Puerto Rico y por supuesto, México.

El ganador de esta gran competencia será la portada de una famosa revista latina, además visitará la destilería de Laverstoke y compartirá con otros bartenders en uno de los bares de cocteles más famosos de Londres. El dominicano Carlos Mejía resultó ganador del primer lugar en este país caribeño de la competencia Most Imaginative Bartender 2016.

“Estoy confiado en mi trabajo, pondré todo mi empeño para representar dignamente mi país, República Dominicana y traer nuevos conocimientos al mundo de la coctelería y mi carrera de bartender». Así se expreso el competidor Quisqueyano al ser abordado sobre el particular.

Competidores de diferentes nacionalidades en el «más imaginativo barman» exploraron la destilería antes los desafíos a que fueron sometidos.

Carlos Mejia, además de Bartender es Ingeniero Agrónomo, gerente de Model Mix, Modelo profesional y un apasionado de la mixología.

Model Mix es una empresa especializada en el área de bares, con servicios de barman, mixologia, modelos y talleres de coctelería. Mejía es un joven muy emprendedor y dedicado, siempre firme cuando se trata de avanzar y alcanzar cada una de sus metas.

Los dos tragos que lo posicionaron en esta gran competencia por su creatividad en la mixologia y que lo elevaron al éxito; es el «Marrón y Negro»; y «Farolito». Cada uno de su autoría.

Su coctel Marrón y Negro, en la competencia resultó el favorito por el jurado y catalogado como el más original, innovador e imaginativo. “Este refrescante coctel está hecho a base de ingredientes como el zumo de toronja, agua de coco, vino de ciruela japonés, sirope de cilantro, agua de rosa y ginebra”.

La preparación y mezcla proviene de recuerdos de infancia, “ya que durante las visitas que les hacía a sus abuelos en compañía de sus padres al municipio de Yamasá, mientras corría y jugaba en el parque con mis primos, escuchábamos a los limpiabotas decir: ‘Limpiabotas, marrón y negro, por cinco cheles los pongo nuevos’. Entonces corríamos a ellos a poner nuestros zapatos como nuevos y de verdad que lo disfrutábamos”, -relató con nostalgia, este joven emprendedor, quien ha obtenido varias certificaciones por el programa World Class y en la Coctelería Creativa. Es además graduado de ingeniero agrónomo de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).