El partido de la Liberación Dominicana acaba de conmemorar se cuadragésimo primer aniversario, en un ambiente caracterizado por la efervescencia, unidad y fortaleza.

Doctor Leonel Fernández, Presidente del PLD ha destacado los logros de los gobiernos del partido morado, que los resumió en reducción de la pobreza, modernización de la Justicia, trasparencia del Estado a través de los concursos y licitaciones, aumento de las riquezas nacionales, construcciones de infraestructuras viales, educativas, presas hidroeléctricas, canales de riego, recintos universitarios, viviendas, entre otros; aumento de la inversión extranjera, manejo atinado de la macroeconomía, paz social y consolidación del estado social.

No hay indicios de división en el partido gobernante, por lo que Leonel augura que se mantendrán en el poder más allá del 2016.

Contrario a la fortaleza del PLD, la oposición luce fragmentada y débil. El PRD de Miguel Vargas luce disminuido por la salida de Hipólito, Abinader y los venerables ancianos y el nuevo PRM enfrenta su primera gran crisis al no ponerse de acuerdo sobre el método de escogencia del candidato presidencial.

Hipolito aboga por una convención abierta y democrática, y Abinader sugiere encuestas.

El juego esta trancado en el PRM, por este tema, y ya Abinader aceptó ser candidato presidencial de un enclenque Partido Humanista Dominicano (PHD), evidenciando que tiene prisa en ser candidato presidencial.

De seguir las cosas como van, con la oposición atomizada, el doctor Leonel Fernández puede ir ya a comprar el traje blanco para su juramentación el 2016.

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