
El Jefe de la Policia y su Plan de Acción
En Editorial octubre 21, 2015 porEl pasado 3 de agosto, el presidente Danilo Medina sorprendió al país con la destitución del Mayor General Castro Castillo como jefe de la Policía Nacional, en cuya posición designó al General de Brigada Nelson R. Peguero Paredes, quien hasta ese momento se desempeñaba como Director Regional en San Juan. Si la noticia sorprendió a todos, el designado no fue la excepción, pues si es cierto que todo general de brigada anhela ocupar la máxima posición de la institución a la que ha dedicado toda su vida, no es menos cierto que la misma está reservada para un número muy reducido del alto mando.
A diferencia de un alcalde, un diputado, un senador y el mismo presidente de la república, quienes las tendencias de las encuestas por las que son medidos, les dice los reales niveles de posibilidades que tienen de llegar a la posición a la que desean llegar. Ello les permite prepararse previamente con un plan de acción o programa de gobierno. Como si eso fuera poco, obtienen además tres meses de transición entre el tiempo en que son electos y su toma de posesión, lo que quiere decir que aun ganando el cargo sin ningún plan, la transición les permite realizarlo.

Un coronel con diferencias personales con el Director Cibao Central de la Policía Nacional, acompañado del Comisionado de los Derechos Humanos.
Con el Jefe de la Policía Nacional sucede todo lo contrario, el Señor Presidente lo designa e inmediatamente lo juramenta en el cargo. Como no tiene elaborado un programa de gobierno ni un plan de acción, debe tomarse un tiempo razonable para elaborarlo, motivo por el cual a nadie que tenga siquiera dos dedos de frente le puede caber en su cabeza que Peguero puede tener aquello como una tacita de cristal. Si así fuese, obedecería a dos razones fundamentales: a) es un mago, o b) esas acciones no son suyas, sino una continuidad de la excelente gestión anterior. Lo cierto es, que ni una cosa ni la otra, por lo que no podemos esperar cosechar arroz en una plantación de yuca.
El Mayor General Peguero Paredes es un oficial con al menos dos profesiones académicas y decenas de diplomados y cursos inherentes a la institución para la que trabaja, con una gran capacidad gerencial que puso de relieve durante su gestión al frente de la Policía Nacional en San Juan, sin embargo, le corresponde ahora dirigir una institución en donde todos los cañones apuntan hacia él. Para nadie es un secreto que los intereses que se licúan allí, si no ponen y quitan gobiernos, al menos los tongonean; y al que se coloque de espalda a esos intereses lo hacen saltar como pelota de baloncesto. Un sector altamente poderoso a través de los años desde Trujillo, se ha mantenido enquistado en el seno de esa institución, convirtiéndola en una isla de poder. Otro factor que tiene en contra es la criminalidad y la delincuencia, las cuales son inversamente proporcionales, es decir, si ataca la delincuencia se le dispara el índice de criminalidad; y si disminuye el de criminalidad se le dispara el de la delincuencia.
Al Mayor General Peguero Paredes, hay que permitirle el tiempo para que imprima su sello de ejecución a su gestión, a partir del cual con un plan de acción y un programa de gestión hará sin duda alguna el mejor desempeño que haya tenido en su historia esa jefatura, pues preparación, voluntad, firmeza, decisión y deseo no le faltan. Sin embargo, debe recibir un voto de confianza de la población para que con su respaldo pueda enfrentar el monstruo que tiene en frente.
Las acciones que en las últimas semanas se han suscitado, tales como las declaraciones del raso aquel, cuyo único objetivo era llamar la atención de una población sedienta de noticia y que cualquier payasada de alguien ocupa los principales titulares en los medios; el coronel del cibao, cuyas diferencias personales con su comandante dilucidó a través de los medios, cuando debió tratarlo por asuntos internos de la uniformada, entre otros ruidos que pudieran salir, no es mas que la secuela dejada por la pasada gestión policial, y que en cada caso ha encontrado respuesta satisfactoria inmediata de parte del actual jefe policial.
Si algo de bueno tiene la designación de Peguero Paredes al frente de la Policía General, es que con ello el Señor Presidente Danilo Medina, envió un mensaje que en su gestión de gobierno puede existir nichos de poder organizado, sin embargo, no es una línea que las posiciones de mayor jerarquía sean ocupadas por los clanes tradicionales, sino por personas como usted que nos honra con su lectura.
A pesar de ello, el Mayor General Nelson Peguero Paredes debe tener ojo avizor, pues si en algo se parece al Pontífice de la Iglesia Católica, es que siempre su sucesor será uno de sus iguales en rango, y nunca faltará algún general travieso cuyas acciones estén divorciadas de los cánones legales, éticos y morales cuyo objetivo sea hacerlo saltar del cargo, realizando campañas mediáticas tirando la piedra y escondiendo la mano.
Comentarios
Así es amigo, sigue con ese motivo que es una buena gestión ( hasta cuando la delincuencia organizada y la criminalidad ) alguien tiene que darle un parao a ese asunto..
Muy buena tu gestión, espero que sigas surgiendo.
En varios puntos de su planteamiento estoy de acuerdo, pese a diferir de usted cuando dice que Peguero Paredes haria la mejor gestion de la historia, ya que eso es algo que no depende de el sino de muchos factores y segundo no me parece prudente que se diga que el raso y el coronel andan buscando camaras ya que bien sabemos todos que la PN anda podrida por dentro y solo cuando alguno de sus miembros es osado como ellos nos logramos enterar de ciertas cosas que se dan alli dentro.